El positivo por esteroides anabolizantes en Seúl del atleta canadiense Ben Johnson, que había pulverizado el récord mundial de los 100 metros lisos con el increíble registro de 9.79, conmocionó al mundo en los
Juegos de la XXIV Olimpiada, segundos que se disputaron en Asia tras los de Tokio en 1964.
En la capital de Corea del Sur participaron 8.397 deportistas de 159 países que compitieron en 31 deportes, incluidos los de exhibición y demostración.
Corea del Norte presionó para que la organización de los
Juegos fuera compartida por los dos países. El COI y el Comité Organizador de Seúl acabaron por aceptar que Corea del Norte albergara la competición de voleibol, uno de los grupos del torneo de fútbol, la carrera ciclista de los 100 kilómetros y el tenis de mesa.
La exigencia del COI de que la frontera de Pyongyang estuviera abierta para que cruzaran sin obstáculos los miembros de la llamada "familia olímpica" acabó por desanimar a los dirigentes de Corea del Norte. Estos llamaron al boicoteo y lograron la solidaridad de Cuba, Albania, Nicaragua e Islas Seychelles.
Desde Seúl se lanzó al mundo la imagen de un país pujante económicamente y dispuesto a abandonar su sistema dictatorial, aunque en las semanas anteriores a los
Juegos se produjeron violentos enfrentamientos entre estudiantes que pedían más libertades y la policía.
La sanción del COI a Ben Johnson fue ejemplar y el atleta canadiense fue desposeído de su medalla, que heredó Carl Lewis. El estadounidense terminó con dos oros y una plata.
La URSS, en su última participación olímpica antes de su desintegración, fue la gran triunfadora con un total de 132 medallas, de ellas 55 de oro.
El ucraniano Sergei Bubka ganó el oro en pértiga.
La gran triunfadora en la velocidad femenina fue la estadounidense Florence Griffith, que ganó tres medallas de oro (100, 200, en los que batió el récord del mundo (21.34) y relevos 4x100) y una de plata en los relevos 4x400. Se retiró poco después de los
Juegos y murió en 1998, a los 38 años, entre sospechas sobre el posible consumo de sustancia prohibidas durante su carrera.
Matt Biondi fue el indiscutible rey de la natación con 5 oros (50, 100 4x100 y 4x400 libre y 4x100 estilos), una plata (100 mariposa) y un bronce (200 libre).
Las alemanas orientales barrieron en la piscina, especialmente Kristin Otto que ganó 6 medallas de oro (50, 100 y 4x100 libre, 100 espalda, 100 mariposa y 4x100 estilos) seguida por la estadounidense Janet Evans con tres oros (400, 800 y 400 estilos.
En baloncesto, la Unión Soviética ganó en la final a Yugoslavia por 76-63. Estados Unidos, que por primera vez no se clasificaba para la final, se contentó con el bronce.
El checoslovaco Miloslav Mecir, que se impuso en la final al estadounidense Tim Mayotte (3-6, 6-2, 6-4, 6-2), y la alemana Steffi Graf, entonces con 15 años, vencedora de la argentina Gabriela Sabatini (6-3, 6-3), ganaron la medalla de oro en tenis, deporte que volvía a la competición oficial después de 64 años.