Se trata de uno de los grandes enigmas de la Historia del Arte.
Un estudio de la Universidad de Friburgo, Alemania, aporta nuevas claves sobre el gesto de la Mona Lisa, y contribuye al debate sobre si está feliz o triste. La enigmática expresión del rostro de la Gioconda sigue despertando inquietud entre los expertos.
Según esta investigación, el 97 por ciento de las personas a las que se pidó que describieran su expresión respondieron que parecía feliz. Si bien, especialistas en esta obra han visto en su gesto señales de tristeza e, incluso, de burla.
A través de copias en blanco y negro de la obra, el equipo de investigadores alemán pidió a los participantes que opinaran sobre qué percibían en los rostros manipulados de Lisa Gherardini, que previamente había sido sometido a retoques en la boca para transmitir tristeza o felicidad.
En opinión de uno de los investigadores, en declaraciones a la agencia AFP, los hallazgos confirman que el cerebro "no tiene una escala fija y absoluta de la felicidad y la tristeza".
La teoría de los investigadores de Friburgo se suma a la publicada por un crítico de arte británico en The Guardian, donde afirma que el aspecto del rostro de la retratada denota que padecía alguna enfermedad; en concreto, sífilis.