Un operario resultó herido.
Esta edición de la Eurocopa no iba a ser menos y tuvo la primera aparición de un espontáneo sobre el césped del Arena de Múnich segundos antes del pitido inicial del Francia - Alemania.
Aunque en esta ocasión, la estretegia fue a la par tan audaz como arriesgada. Un activista de Greenpeace bajó de los cielos en paracaídas lanzando un balón gigante con un mensaje contra el uso de combustibles fósiles. Sin embargo, los cables de la spider cam, con los que se mueve por las alturas del campo, estuvieron a punto de provocar males mayores.
Según la televisión alemana, durante la caída del espontáneo, un responsable de iluminación resultó herido leve y fue atendido por personal sanitario.