Crónica política
La banda terrorista ETA ha echado mano de una vieja estrategia, la huelga de hambre, para conseguir sus objetivos políticos, al menos, el primero de ellos, la liberación de sus presos y el fin de su dispersión por distintas cárceles españoles y lograr agruparlos en prisiones del País Vasco o cárceles próximas a esa comunidad autónoma.