Europa: la teta y la urna

La ‘Tercera España’ de la Troika Pedrojota-Bono-Aguirre, no resiste un sondeo del CIS y mucho menos una ‘israelita’ a las puertas de un colegio electoral. Communion of interests. Homenaje a Bigas Luna. No me explico cómo los cerebros de la NASA todavía se siguen preguntando si realmente estamos preparados para contactar con los extraterrestres.

España, un suponer, en modo electoral. La cita a ciegas, el veinticinco. Me ahorro la rima. Celtiberia, a pecho descubierto, como las dos histéricas que irrumpieron esta semana en un mitin de Esperanza al grito de «pueden más dos tetas que dos carretas», pintarrajeadas con el lema ‘Fascist epidemic’ en todo lo alto de sus ubres cimbreantes, diminutas y saltarinas como pelotas de pimpón.

Reconozco que puede que me haya quedado un poco misógino un comentario tan mamón, más propio de un destetado prematuro, víctima de alguna extraña tara aristotélica que le ha debido de dejar secuelas incurables. Instintos primarios (Schlichting). Pero nada más lejos de mi intención, pues nada hay más hermoso en esta vida que la Venus que se esconde en tu talle de Afrodita, ninfa de mis sueños, amada mía.

Por desgracia, ninguna de las dos amazonas se asemeja ni de lejos a Martina Stoessel, Violetta, ex Disney Channel, la misma que ha dejado embelesado en su canalillo al mismísimo alcalde de Buenos Aires, Mauricio Macri, que confiesa que a punto estuvo de marearse y zambullirse de una cabezada, sin darse cuenta ni poderlo evitar, en el recreativo castillo hinchable de la pechera palabra de honor de la zagala, una mujer con hechuras de mesonera del Campo de Criptana, de mirada caliente como el cordero a la caldereta y el pisto manchego que tanto le gustaba a Saritísima Montiel. Premio Sonrisa Vertical.

Qué daño ha hecho la paridad de Aído y Pajín y el falso feminismo de Estado de Zapatero, que según su ex ministra Ángeles González-Sinde, discriminaba a los hombres en favor de las damiselas, porque le resultaba una impostura más glamurosa y molona desde el punto de vista de la propaganda electoral.

El santoral de Valenciano, ‘La Chica de Ayer’ (El Chino de la coleta dixit), explica muchas cosas que suceden en la zurda ultramontana del SOE. Elena confiesa que en su vida sólo ha rendido culto a tres santos, pero a un solo Dios, Felipe, y después a Jesucristo Superstar y al Che, que este sí que es un dogma trinitario difícilmente asumible hasta por el parroquiano más crédulo. De Alfredo nada se dice, debe ser que no ha conseguido marcar su vida a fuego evangélico, como los anteriores.

España entera es una caseta beoda, rezumante de manzanilla, como las del recinto ferial del sevillano barrio de Los Remedios, que como es sabido antes fueron establos donde se traficaba, por lo legal, con cabezas de ganado. A fin de cuentas, el uso que se le da al establo sigue siendo el mismo: agropecuario.

La caseta del PCE no tiene desperdicio en lo que al santoral comunista se refiere, pues siguen entronizando en el altar del túnel del tiempo a La Pasionaria y a Ernesto, que según Sartre fue «el ser humano más completo de nuestra época». La España cateta no tiene remedio posible. Que sea una de gambas y un rebujito.

A muchos votantes subyugados por el partido al que profesan un amor ciego, les viene a pasar lo que a La Pantoja, a quien según su abogado, la hormona ‘del amor’ le impidió ver la verdad del tipo de persona que era Cachuli. «Se me enamora el alma, se me enamora…».
Otro que se ha liberado de sus recuerdos es César Antonio Molina, el ex ministro de Cultura, «Un intelectual perdido en la política», a imagen y semejanza de Manuel Azaña, que ha acabado arrepintiéndose de haber sucumbido a los arrumacos de Zapatero, que primero lo convenció y al año y medio se lo cepilló y colocó en su lugar a la ya mentada González-Sinde. Dice César: «Yo era de la ceja alta y se pasó a la ceja baja».

Que Hacienda haya vuelto a demostrar que no tiene corazón multando a La Caballé y haciéndole una paralela a Casillas, es algo que entra dentro de la portería sin red que es este país nuestro del tejemaneje, las bajas temerarias y los sobrecostes: la España egipcia que viaja en AVE. ¡A mí, que me registren!

Zorrilla tenía que ser donde el Madrit florentino perdió definitivamente la liga. A los merengues siempre les quedará el consuelo del gol de espuela que marcó Cristiano, antes de lesionarse otra vez, aunque seguro que se repone a tiempo para amargarnos la final de la UEFA Champions League, la de la copa con las orejas principescas. El verdadero Tratado de Lisboa se firmará el día veinticuatro en el Estadio de Nossa Senhora da Luz del Benfica, donde el abajo firmante contempló hace ya varias primaveras el vuelo del águila.

España, y todo lo que le cuelga. Reunión del Consejo Español de Competitividad: Mariano se hace un selfie con los empresarios que parten el bacalao en la lonja de España. Separatists in Catalonia. Cospedal, Lacospe del niqui del cocodrilo, conquista Twitter: «# Troika». España, sin anestesia. Cortita y al pie. Días de engrudo, sufragio y rhythm and blues, de cuando Elvis pisó por vez primera la Casa Blanca.