Cientos de miles de personas marcharon por las principales ciudades para pedir la libertad de educación.
La plataforma Más Plurales ha vuelto a convocar una manifestación en coche para protestar contra la Lomloe, la nueva ley de educación conocida como la 'Ley Celaá'. Desde las 11:00 horas, miles de vehículos han ocupado las calles de las principales ciudades de España.
La más multitudinaria ha tenido lugar en Madrid. Coches con pasquines amarillos y naranjas con el lema "Stop ley Celaá" han recorrido el centro de la capital para protestar contra la reforma educativa aprobada en el Congreso, al considerar que "ataca" la libertad de los padres para escoger la enseñanza que quieren para sus hijos. Junto a los participantes se ha podido ver también una furgoneta amarilla con la frase "Queridos Reyes Magos, os pido libertad de enseñanza".
Cientos de miles de personas han salido a la calle en más de 50 ciudades de todo el territorio nacional para visibilizar el profundo descontento de un amplio sector de la sociedad ante la Lomloe, y para solicitar su paralización.
Los partidos de la oposición se han sumado en masa a las protestas. A la marcha de Madrid ha acudido el presidente del PP, Pablo Casado, flanqueado por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el alcalde de la capital, José Luis Martínez Almeida. También asisten otros representantes de los partidos de la oposición, como el secretario general de Vox, Javier Ortega Smith.
El PP está decidido a combatir la ley en las comunidades autónomas donde gobierna. Así, Ayuso avanzó que elevaría los conciertos educativos a diez años para blindar la concertada ante la futura ley y dijo que se adelantaría la preinscripción del próximo curso para que no les afecte la futura ley educativa.
Por su parte, Pablo Casado reclamó al Gobierno "más humildad" y que escuche a las familias que claman contra la nueva ley.
Casado considera que, contra este cambio, no solo están los padres de la educación concertada "que quieren seguir decidiendo el modelo educativo de sus hijos" ni tampoco solo los de los niños de educación especial, sino también las familias que deciden inscribir a sus hijos en el sistema público.
"Hoy también se manifiestan los padres de la educación pública que quieren seguir eligiendo colegio, porque de esto va nuestra reivindicación: de libertad para elegir el modelo y para elegir el colegio", ha subrayado el líder de la oposición.
En Logroño, la portavoz del Grupo Popular en el Congreso de los Diputados, Cuca Gamarra, ha acusado al Gobierno de buscar "enfrentar a los españoles" con la reforma educativa y ha recalcado que la elección de centro educativo "la deben hacer los padres y no el Estado".
Mientras, en Barcelona, Edmundo Bal ha reclamado al Gobierno que aproveche el pleno del Senado de la próxima semana para volver a introducir el castellano como lengua vehicular en la 'Ley Celaá'. El portavoz adjunto de Cs ha señalado que esta ley supone "un acto impositivo" y de "cercenamiento del derecho de los padres a que puedan elegir la lengua materna de sus hijos" con el castellano como vehicular junto con el catalán.
El secretario general de la Federación de Sindicatos Independientes de Enseñanza (FISIE) de Madrid, Francisco José del Castillo, ha querido lanzar "un último grito" para decirle al Gobierno que no están de acuerdo con esta ley "injusta" que "ataca" la libertad de los ciudadanos y la libertad de elección de las familias.
Con ello, según el portavoz de esta federación y de la plataforma Más Plurales, Javier Muñoyerro, también se ponen en "serio peligro" miles de puestos de trabajo, tanto de profesionales de la enseñanza como de personal de administración y servicios de colegios concertados. "Estamos, una vez más, para protestar contra esta norma, porque no es el momento ni las formas de tramitar una ley orgánica", ha añadido.
Más Plurales ha recordado también que continuará mostrando su oposición hasta el último momento, con el fin de evitar que la votación prevista para el próximo día 23 en el Senado se mantenga sin aceptar enmiendas al texto.
Los representantes de la plataforma realizaron elpasado miércoles la entrega simbólica de 1.924.000 de firmas recogidas hasta el momento contra la 'Ley Celaá'.