revista de prensa
Gistau cita a Maradona: "La política siempre mancha la pelota"
lunes 08 de octubre de 2012, 09:29h
El Mundo lleva también a primera página el encuentro entre el Real Madrid y el Barcelona para decir que el Barça convierte su estadio “en un póster independentista” con foto del Camp Nou engalanado con una ‘senyera’ creada por el público. El periódico afirma que “decenas de miles gritaron ‘independencia’”. Otro de los titulares indica que Fainé planteó a Rajoy la fusión de Caixabank y Popular tras la Diada.
El Mundo señala en su editorial “Cuando un club se presta al juego sucio político” que “aunque es verdad que la senyera es la bandera oficial de la comunidad, no se debe restar importancia a la decisión del presidente del Barça de prestar al club al interés electoral de Mas. El líder de CiU rentabilizó así un gran evento mediático, con 400 millones de personas viendo el clásico y la bandera gigante. Aunque Mas sea el impulsor de este viaje a ninguna parte, la responsabilidad de los sucedido ayer es de Sandro Rosell, un presidente que hizo campaña prometiendo el fin de la politización del Barça de la era Laporta. Al poner al club al servicio de la causa de Mas, Rosell se ha comportado de forma frívola e irresponsable, y también ha jugado sucio, violentando a los espectadores no independentistas, o ni siquiera nacionalistas, que como es lógico, no pudieron rechazar su parte en el mosaico. Además, ha tomado como rehenes a millones de personas que son seguidores del Barça sin tener nada que ver con Cataluña”. Concluye: “Puede que ayer el Barça fuera más que un club, pero también fue menos de lo exigible a una entidad madura y responsable”.
Sobre el mismo tema, David Gistau afirma que “la sublimación futbolística de una pasión política provocó en el estadio una dependencia ambiental curiosa: el entusiasmo por la emancipación depende de los goles. No deja de haber un matiz paródico, casi grotesco, en el discurso emancipador de un pueblo cuyo entusiasmo depende de que un chaval nacido en un barrio de Rosario, a orillas del río Paraná, acierte a colocar un balón allí donde no puede alcanzarlo un portero”. Apunta que “por usar una frase feliz de Maradona, la política siempre mancha la pelota, y de apodera de ella porque en el estadio ya hay una cohesión primaria que se presta a dejarse inflamar por la consigna. Tuvo que ser Gerard Piqué, un futbolista, el que aportara cordura aduciendo que un Real Madrid-Barcelona jamás debería convertirse en un España-Cataluña, y menos aún influido por una concepción hostil, de enemigos, que tan solo han alcanzado el grado de sofisticación suficiente para matarse en lances de fogueo”.
La Razón dedica su foto de primera página al Clásico y titula “Más fútbol, menos independencia” con una instantánea de Cristiano Ronaldo y Sergio Ramos. Pese a la llamada de Artur Mas, señala, “los gritos para jalear a los jugadores superaron a las proclamas soberanistas”. El otro titular destacado de primera página es “Los verificadores entrarán en campaña para aupar a Bildu” y añade que habrían mantenido varias reuniones con dirigentes de Eta.
La Razón dice en ‘Excusas para otra huelga’ que “no hay que ser muy perspicaz para darse cuenta de que la marcha dominical de ayer” para protestar contra la política del Gobierno “no tenía más propósito real que ejercitar el músculo para la cita de noviembre. Tampoco debe sorprender la participación entusiástica de dirigentes del PSOE, entre ellos el anterior ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, un raro espécimen político que habiendo sido víctima de una huelga general parece muy feliz cambiándose de bando. El propósito de Rubalcaba es liderar esa ‘Cumbre social’ de sindicatos y grupos de izquierda, a la vez que impedir el ascenso de IU. Es el único paraguas bajo el que puede guarecerse de la profunda crisis del partido, con grietas alarmantes en el PSC, y de las pésimas expectativas electorales. Si como pronostican el CIS y otros sondeos el PSOE se hunde en el País Vasco, se encasquilla en Galicia y sufre un descalabro histórico en Cataluña, el único clavo ardiendo que le queda a Rubalcaba es el de la movilización permanente y pedir en la calle lo que le niegan las urnas. La tentación de deslizarse hacia el populismo es más que real. Que los sindicalistas de UGT y CC OO traten de mantener su maltrecho prestigio y sus mermadas filas con liturgias pancarteras como las de ayer es hasta cierto punto comprensible. Pero que el principal partido de la oposición juegue a la huelga general es una frivolidad que se volverá contra él. Mal que bien, España está sentando las bases para recuperar la credibilidad que el último Gobierno socialista arruinó y es obligación del PSOE contribuir a ello”.
El País publica un sondeo de Metroscopia en primera página y dice que la fidelidad a los grandes partidos se desploma en plena campaña para añadir que el PP y el PSOE llegan a las urnas en Galicia y Euskadi muy desgastados. Otro de los titulares destacados es que miles de manifestantes exigen un referéndum sobre los recortes. La foto principal es para el partido que enfrentó al Real Madrid y al Barcelona del que dice que Messi y Cristiano brillaron en un clásico vibrante.
El editorial de El País apunta que “el profundo malestar social incubado durante la crisis económica está derivando en un problema de confianza en el sistema político. Nueve ciudadanos de cada 10 están de acuerdo en que la crisis la pagan todos, menos los bancos y los más ricos, según el barómetro de Metroscopia publicado por EL PAÍS”. “Que el 77% de los ciudadanos comparta los argumentos de los que se manifestaron en las cercanías del Congreso de los Diputados –apunta– no implica una voluntad masiva de ocupar las calles, pero tampoco desautoriza a los que lo hacen”. Finaliza con que “los españoles, a los que ya no da miedo reformar la Constitución, lamentan que los principales partidos no quieran volver al método basado en el pacto y la transacción propio del periodo de la Transición. La situación lo exige. El entendimiento y la búsqueda consensuada de soluciones es la única esperanza que le queda a la mayoría silenciosa para encontrar una salida del túnel y repartir más equitativamente las cargas, precisamente la vía no ensayada durante la crisis.
El catedrático jubilado de la Universidad Complutense y director del Departamento de Estudios Europeos del Instituto Universitario Ortega y Gasset, Francisco Rubio Llorente, afirma en ‘Un referéndum para Cataluña’ que “si el nuevo Parlamento respalda la consulta debe presentar una proposición de ley orgánica”. Afirma que “una decisión de esta naturaleza requiere una mayoría muy cualificada, no una mayoría simple” y concluye que “si desea la independencia una minoría territorializada no se pueden oponer obstáculos formales. Pero hay que averiguar la existencia, amplitud y solidez de esta supuesta voluntad popular”.
ABC coincide con el resto de periódicos en destacar en primera página el partido de fútbol. “El Madrid aplaca al Camp Nou”, dice su titular destacado, al que añade que los blancos empatan a dos en Barcelona con sendos goles de Ronaldo y Messi, y el Atlético alcanza al líder. La foto es para Cristiano Ronaldo durante la celebración de uno de los goles. Otro de los titulares destacados es “Despidos masivos en Iberia”. La aerolínea, afirma, presentará un ERE de hasta 6.000 empleados en noviembre para compensar las pérdidas.
ABC destaca en ‘Huelga y demagogia sindical” que “ por mnucho que se llenen la boca hablando de fraude electoral y que califiquen los próximos presupuestos de camino de perdición, los líderes sindicales son conscientes del desprestigio de sus organizaciones ante la opinión pública. Los ciudadanos recuerdan la mansedumbre de UGT y CCOO ante los recortes impuestos por Zapatero y su intento de salvar la cara con una fallida huelga general de escaso seguimiento. En cambio, perciben ahora un planteamiento radical contra el PP con el único objetivo de desgastar políticamente al Ejecutivo”. Concluye: “España no está para huelgas generales, sino para que partidos, organizaciones empresariales y sindicatos sean capaces de buscar acuerdos a favor del interés general”.
La Gaceta relega el partido entre el Real Madrid y el Barcelona a un destacado en primera página llevándose el mayor protagonismo las concentraciones contra el aborto en más de cien ciudades españolas y del extranjero. “Un gran clamor por la vida”, dice el periódico, que añade que miles de personas exigen en Madrid la derogación de la ley del aborto.