
La rebelión interna ha subido de tono esta mañana con la presentación en la sede de Génova del Partido Popular de tres enmiendas a la ponencia política que será llevada al próximo congreso nacional del partido. Las tres enmiendas proponen un programa político alternativo, articulado en torno a la reforma parcial de la Constitución y un pacto para llevarla a cabo con el PSOE y las demás fuerzas políticas de ámbito nacional. Alejo Vidal-Quadras, vicepresidente del Parlamento Europeo, Santiago Abascal, diputado del Parlamento Vasco, Carlos Delgado, alcalde de Calvià y candidato a la presidencia PP Balear, Luis Fraga, senador, Eugenio Nasarre, diputado a Cortes Generales y Vicente de la Quintana, concejal del PP en Durango (Vizcaya) son los seis compromisarios que han estampado sus firma en las enmiendas.
En concreto, éstas pretenden la modificación del conjunto del texto del epígrafe I (Introducción), del conjunto del texto del epígrafe II (Principios y valores del PP) y del texto de los apartados 1, 2 y 3 del epígrafe III( España, gran nación de ciudadanos libres e iguales. Modelo de Estado).

Otro de los episodios que cimentan esta rebelión en el seno del PP, en este caso el de una posible candidatura de la presidenta del la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, parecía estar enterrado. En cambio, el telediario de La Primera de TVE abrió la noche del domingo con los planes de Aguirre que, según las fuentes consultadas por la cadena pública, podría estar preparando disputar el liderazgo del PP a Mariano Rajoy. Este hecho lo habrían motivado últimos acontecimientos como el anuncio de abandono de María San Gil de la presidencia del PP vasco o la presencia de Alberto Ruiz-Gallardón, alcalde de Madrid y no demasiado amigo de la autodenominada "lideresa", en el futuro equipo de Rajoy si sale victorioso del congreso.
Esta misma información remarca que son compañeros suyos los que precisamente la están arropando para que se decida por plantar cara a Rajoy, y sería el respaldo de su círculo más próximo el que más deseoso está de que Aguirre encabece una candidatura alternativa. Sin embargo, la presidenta de la Comunidad de Madrid se mantiene en el "ni sí, ni no, ni todo lo contrario" y, como ya ha afirmado en otras ocasiones, el primero en enterarse de sus intenciones será el propio Rajoy.
Ambigüedad es el término que mejor define la actitud de Aguirre en sus declaraciones al respecto, con frases como "mi apoyo a Rajoy es inamovible o no", con la negación rotunda de su candidatura en algunas ocasiones y el apoyo férreo a los detractores de Rajoy en otras. En sus últimas intervenciones tan solo ha dado pistas sobre sus discrepancias con el presidente de su partido. "Que una persona como María San Gil haya decidido abandonar la ponencia por discrepancias de criterio, nos debe mover a todos a la reflexión", señaló tras el desmarque de la dirigente vasca. La semana pasada, además, lanzó una de las críticas más evidentes que se han podido escuchar en boca de Aguirre: "Algo se está haciendo muy mal en la dirección nacional del PP".
Juan Costa, al alza
Otros, en cambio, ven a Juan Costa como el "Zapatero" del PP -término que se atribuye a Eduardo Zaplana-, es decir, un efectivo joven y que también cuenta con un nutrido grupo de populares que le animan a presentar una candidatura. El ex ministro de Ciencia y Tecnología, hombre de Rodrigo Rato, ex vicepresidente económico con Aznar, no ha vertido reproche alguno sobre Rajoy ni ha enseñado sus cartas, aunque muchas quinielas le señalan como la posible sorpresa de cara a la cita de Valencia.
Hasta el momento, la única vinculación conocida de Costa con el congreso de junio es más económica que política ya que, como informó EL IMPARCIAL la pasada semana en un confidencial, el evento lo organizará la empresa de comunicación en la que trabaja su propia esposa.
Elorriaga no cree que Rajoy sea el líder que necesita el PP 
El secretario de Comunicación del PP, Gabriel Elorriaga, pide que el Partido Popular sustituya a Mariano Rajoy, presidente de la formación, por otro líder, en un artículo que publica en el diario "El Mundo". Según Elorriaga, Rajoy "no está en condiciones de ofrecer" un "liderazgo renovado, sólido e integrador" que, en su opinión, es lo que necesita el PP. Además, cree que se está produciendo un "falso debate ideológico que tan sólo aporta exclusiones; un discurso arrojadizo que más pretende distanciar a algunos que invitar a nadie".
Este nuevo miembro del partido de Génova que se postula en contra de la candidatura de Rajoy apuesta por que esa renovación pase por los rostros que "surgieron y crecieron a la sombra del mandato de Aznar" al ser gente "preparada para asumir el relevo, con experiencia, talento y determinación". Es precisamente el ex presidente del Gobierno, para el secretario de Comunicación popular, quien fue capaz de ofrecer "un proyecto político atractivo e integrador", con el que el PP "se supo transformar en un partido ganador".
Elorriaga, quien participó activamente en las dos últimas campaña electorales del PP, en su artículo de "El Mundo", muestra su descontento ante las "pocas incorporaciones y los demasiados abandonos de nuestro proyecto" desde 1989, con una "brillante excepción" que es su "buen amigo Manuel Pizarro". En su opinión, "han sido insuficientes los progresos electorales alcanzados y bastante significativos algunos retrocesos. Ambas circunstancias deben formar parte de cualquier análisis".
Por último, opina que ha surgido un "falso debate ideológico que tan sólo aporta exclusiones y renuncias; un discurso arrojadizo que más pretende distanciar a algunos que invitar a nadie".
Elorriaga no saltaba a la primera plana de los periódicos desde que, en plena campaña electoral, declaró a un medio que si el PP lograba "sembrar suficientes dudas", los votantes socialistas se quedarían en casa.