El Gobierno ha aprobado el informe para la reforma de las Administraciones Públicas, un “gigantesco” e “inédito” trabajo, según Soraya Saénz de Santamaría, que zanja duplicidades y persigue una “racionalización” de competencias que aporte mayor eficacia a un menor coste. El ahorro previsto hasta 2015 será de 37.700 millones de euros.
Soraya Sáenz de Santamaría y Cristóbal Montoro han anunciado tras el
Consejo de Ministros la aprobación del informe de reforma de las
Administraciones Públicas, elaborada por la CORE o comisión creada con este fin. Frente a ellos, en los asientos destinados a asesores y a prensa, Jaime Pérez Renovales y Pilar Platero, secretarios de Presidencia y Administraciones Públicas, respectivamente, personas que mucho han tenido que ver en la elaboración del documento. Poco quedaba por descubrir tras varios días esta semana dedicados a explicar al detalle cada una de las 217 medidas que incluye, apenas valoraciones y una cifra aproximada del
ahorro previsto una vez el reglamento, inédito en la democracia, esté en marcha.
La vicepresidenta del Gobierno ha aplaudido el trabajo
“gigantesco, titánico” que suponía el desarrollo del proyecto. A su juicio, su mayor bondad es que da lugar a una “administración cercana, transparente, eficiente y más barata”. Además, ha subrayado que dará un mejor servicio al ciudadano y que “cambiará la cultura administrativa”, poniendo fin a largos procesos burocráticos. Esto será gracias a la cooperación entre lo central, lo autonómico y lo local, que compartirán datos y deberán ponerse de acuerdo para no repetir organismos o en todo caso entes con funciones similares o eliminar aquellos que hayan perdido sentido o quedado sin función, con una dieta estricta en materia de gastos y personal.
El ministro de Hacienda, positivo y de buen humor, al igual que su compañera de mesa, los dos ante un enorme tocho que contenía la reforma, ha celebrado que esta se haya hecho “desde dentro, desde los servidores públicos” y a coste cero, el mismo que supone la creación de una oficina de seguimiento que va a vigilar de cerca la ejecución del plan y elaborará un informe cada tres meses. El esperado dato del ahorro no lo ha aportado él sino Sáenz de Santamaría. La cifra:
37.700 millones de euros entre 2012 y 2015. Desgranada, corresponde a la “racionalización” de las administraciones, a la reforma de la local y a las decisiones (“horribles” algunas, según Montoro, por las que han sido despedidos más de 300.000 trabajadores) en materia de empleo.
Y, pese a todo, es ahora cuando arranca todo.
“El trabajo empieza ahora”, ha admitido la vicepresidenta. Lo relativo al ámbito central entra en marcha este mismo lunes, mientras que el resto de puntos empiezan a moverse desde este momento. Hay buena sintonía con el Partido Socialista en este capítulo, de modo que los mayores escollos, de haberlos, se presumen con regiones como Cataluña o el País Vasco, más reacias a prescindir de organismos que les resten soberanía en beneficio de Madrid. No obstante, hay buenas expectativas de entendimiento, según fuentes del Ejecutivo, y la presión o manga ancha con los distintos territorios dependerá en buena medida de que sepan mantener las cuentas en orden. La Estabilidad, incluida recientemente en la Constitución, sigue siendo objetivo capital.