El 14 de junio, el estudio español Cruz y Ortiz Arquitectos recibió el I Premio de Remodelación y Recuperación del Patrimonio AADIPA por su intervención en la restauración del Rijksmuseum de Ámsterdam. Concedido por el colegio de Arquitectos de Cataluña y la Agrupación de Arquitectos para la Defensa y la Intervención en el Patrimonio Arquitectónico, el galardón reconoce la labor llevada a cabo por este estudio en un edificio del siglo XIX que ha transformado en uno del siglo XXI y que goza de gran interés artístico por albergar obra de Rembrandt, Frans Hals o Vermeer.
La remodelación del
Rijksmuseum de Ámsterdam a cargo del estudio español
Cruz y Ortiz Arquitectos fue reconocida la semana pasada con el I Premio de Remodelación y Recuperación del Patrimonio AADIPA concedido por el colegio de Arquitectos de Cataluña, COAC, y la Agrupación de Arquitectos para la Defensa y la Intervención en el Patrimonio Arquitectónico.

La intervención realizada por Antonio Cruz y Antonio Ortiz durante los últimos
10 años en uno de los museos de referencia en Europa, de gran interés artístico por albergar la obra de creadores holandeses como Rembrandt – incluida la admirada
Ronda de noche-, Vermeer, Frans Hal o el paisajista Ruysdael, ha contribuido a transformar un edificio del siglo XIX en un museo propio del siglo XX.

Una nota de prensa remitida a este periódico por el estudio, destaca "la entrada espaciosa y luminosa, el Pabellón Asiático y las magníficas salas renovadas” como los principales logros de su intervención, que ha estado dirigida por el
arquitecto restaurador Van Hoogevest y que ha contado también con la colaboración del parisino Jean-Michael Wilmotted, encargado del diseño del interior de las nuevas salas.

Según indica el estudio, los arquitectos sevillanos “se basaron en el diseño original de Pierre Cuyperse, el arquitecto del museo en el siglo XIX” para llevar a cabo un proyecto que ahonda en la importancia “de la luz y del espacio” como demuestra la transformación de los
patios originales cubiertos en un amplio espacio de gran
luminosidad. Asimismo, se han encargado del diseño del
Pabellón Asiático “de piedra natural portuguesa y cristal y rodeado de un estanque, que se caracteriza por sus superficies en ángulo y unos ejes visuales inusuales”. Alberga una rica colección de arte asiático procedente de China, Japón, Indonesia y la India.

“La mundialmente famosa
colección del Rijksmuseum se presenta de una manera totalmente nueva”, señala el estudio de arquitectura español, que enumera en 80 las salas del edificio y en 8.000 las obras de arte expuestas pertenecientes a 800 años de historia.

A juicio de los arquitectos, “la idea inicial del proyecto fue hacer que el edificio recuperara su calidad y esplendor originales y dotarlo de los medios necesarios de un museo actual dado el incremento de visitantes”. Así pues, la nueva forma de concebir la colección del museo propuesta por este estudio supone un viaje por la historia del arte de los
Países Bajos desde la Edad Media hasta el siglo XX a través de pinturas, estampas, dibujos, objetos de plata, porcelana o cerámica de Delft.