Deutsche Bank, primer banco comercial privado de Alemania, registró en el segundo trimestre del año unas pérdidas netas atribuidas de 3.190 millones de euros, debido a que imputó en este periodo la mayor parte de los costes provocados por la reducción de 18.000 empleos.
Deutsche Bank informó de que los costes de la reducción de empleos fueron de 3.400 millones de euros, más de lo que se esperaba.