Dolores Delgado habla de “anomalía democrática” al mantener al dictador en un mausoleo público, pero no responde a los policías por los disturbios en Cataluña.
El Gobierno quiere castigar que unas pocas decenas de nostálgicos franquistas se concentren brazo en alto y con vivas al caudillo, pero mira hacia otro lado cuando le piden que sea más contundente con los disturbios en Cataluña y que a los detenidos se les acuse de terrorismo callejero.
Después de que un pequeño grupo de personas se concentrara el jueves junto al cementerio de Mingorrubio-El Pardo para ser testigos del entierro del dictador y despedirle con banderas preconstitucionales, la ministra de Justicia en funciones, Dolores Delgado, ha apostado por reformar el Código Penal para castigar la apología del franquismo.
En una entrevista con Efe, ha hablado de la “anomalía democrática” que suponía mantener al dictador en un mausoleo público junto a sus víctimas, pero no ha hecho ninguna referencia ni al carácter electoral de exhumar a Franco en plena precampaña, a poco más de dos semana para acudir a las urnas, ni a las peticiones que hasta cuatro sindicatos policiales han hecho al Gobierno para que los detenidos en Cataluña por los graves disturbios vayan a prisión con imputaciones de terrorismo callejero.
Hay que recordar que la práctica totalidad de partidos del arco parlamentarios pidieron al Ejecutivo de Pedro Sánchez que enviara más refuerzos a Cataluña ante el cariz que estaban tomando los acontecimientos y que representantes de los sindicatos policiales SUP, SPP, CEP y UFP pidieron al Gobierno y a la Fiscalía más contundencia contra los disturbios violentos en Cataluña tras la sentencia por el procés, así como que los detenidos vayan a prisión con imputaciones de terrorismo callejero.
Igualmente, insistieron en que “por los medios y tácticas que se han empleado” dicha estrategia “buscaba la muerte de algún policía nacional” y destacaron que hasta 134 agentes tuvieron que ser atendidos, “permaneciendo alguno de ellos ingresado en la unidad de cuidados intensivos en estado grave”.
La ministra de Justicia en funciones, Dolores Delgado, testigo privilegiado de la exhumación de Franciso Franco en el Valle de los Caídos como notaria mayor del Reino, lo decía claramente: “Yo sí creo que sería bueno una reforma del Código Penal”.
Sentencia del procés
Preguntada por la sentencia del procés y por el futuro penitenciario de los condenados, la ministra recuerda únicamente que “ha funcionado el Estado de Derecho” y se ha comprobado que el sistema judicial funciona, "que tiene garantías y que además es transparente, con igualdad de armas en las acusaciones y las defensas".
No ha querido hacer “pronósticos o ficciones” sobre la posibilidad de que los encarcelados reciban pronto beneficios penitenciarios con el aval de los servicios penitenciarios de la Generalidad, pero lamenta que se intente “jugar” con este tema en periodo preelectoral.
“Tenemos una ley, un reglamento que desarrolla la ley, tenemos una aplicación de estas normas por parte de la administración penitenciaria y luego existen los órganos de control de esas decisiones. Este es el sistema”, resume.