Como viene siendo habitual en la sesión de control al Gobierno, el vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, y la diputada de Vox Macarena Olona han protagonizado un tenso a cara a cara en el turno de preguntas al Ejecutivo.
Olona ha pedido a Iglesias que dimita y ha ironizado con que dimitir "no es un nombre ruso". La diputada de la formación oliva ha instado al líder de Unidas Podemos a que abandone su cargo de vicepresidente y que ponga fin a su "huida" pues considera que ha incumplidor innumerables promesas desde la creación de su partido en 2014: "¿Qué pasa, señor Iglesias, que la cal ya no es tan viva desde la Moncloa?".
En opinión de Iglesias, a Vox le gustaría que en España tuviéramos una justicia "como la de la dictadura que persiguiera a los demócratas".
El agrio diálogo entre ambos ha continuado con Olona señalando a Iglesias por haber abandonado la "lucha de clases con el puño alzado" y haberla sustituido por "revistas del corazón como Isabel Preysler en Galapagar".
Según la diputada de Vox, lejos de "democratizar la política", Iglesias ha "vulgarizado la democracia" para terminar convirtiéndose en "casta".
"Nos equivocamos cuando les llamamos fascistas porque son una cosa más cutre. Son la derecha de toda la vida que quiere evitar los complejos con banderas en la mascarilla", ha respondido Iglesias, a lo que Olona ha espetado: "Nos veremos en la próxima sesión de control" e Iglesias, a continuación: "Como caballero retado me toca elegir las armas: la palabra".