Después de haber aplicado un estado de alarma inesperado, ahora dice que sigue "tendiendo la mano" al Gobierno regional para "trabajar conjuntamente".
Pedro Sánchez no hace autocrítica y se ratifica en su decisión de imponer el estado de alarma en Madrid. El presidente del Gobierno ha justificado que no podían quedarse "de brazos cruzados" ante la situación "preocupante" en la región.
En una comparecencia de prensa junto al primer ministro portugués, Antonio Costa, con motivo de la XXXI Cumbre Hispano-Lusa en Guarda (Portugal), Sánchez ha señalado que espera que en los quince días que dura la alarma se pueda contener esta situación, y ha insistido en que el Ejecutivo sigue "tendiendo la mano" al Gobierno regional para "trabajar conjuntamente".
Ha explicado que, en sus conversaciones de estos días con la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, le ha dicho que el Ejecutivo está abierto "siempre, siempre, siempre" a "hablar y negociar medidas" para las próximas semanas, pero ha agregado que, "cuando no se toman soluciones para aplacar la curva, el Gobierno no puede mirar hacia otro lado".
"Ayer el ministro de Sanidad fue muy claro. Siempre hemos puesto por encima de cualquier otra consideración la salud", ha enfatizado el Sánchez para defender "una respuesta clara y contundente" a la pandemia.
El jefe del Ejecutivo ha respaldado sin fisuras a Salvador Illa que el viernes, solo horas después de la aprobación el estado de alarma, se mostró inusualmente duro. Illa, lejos de su habitual cortesía, atacó a Ayuso, a la que directamete acusó de "no hacer nada" para frenar la expansión del virus en la región a pesar de los continuos requerimientos del Gobierno central. Según Sánchez, el Gobierno "comparte" esas acusaciones.
Así, el líder del Ejecutivo ha reivindicado la intervención del Gobierno con el estado de alarma en nueve municipios madrileños y ha defendido que, con este decreto, se implementa una "respuesta jurídica" pero que continúan las mismas medidas restrictivas en estos territorios tras ser tumbadas por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM).
"Nosotros no venimos ni a imponer ni a tutelar", ha asegurado Sánchez después de que el Gobierno aprobara el decreto del estado de alarma en un Consejo de Ministros extraordinario y tras lanzar un ultimátum al Gobierno regional para que tomara medidas que evitaran esta norma que finalmente entró en vigor en la tarde de este viernes.