Una plaza de Madrid ubicada frente a los números 43 y 45 de la calle Fuencarral, entre Malasueña y Chueca, ha sido bautizada con el nombre de Raffaella Carrà, fallecida en julio del pasado año.
Una placa de nueve azulejos con la imagen a color de Carrà, obra del pintor Ángel García Pinto, recuerda a la artista con sus característicos flequillo y melena rubia.
Es el homenaje que Madrid ha querido rendirle a la artista italiana, fuertemente vinculada a España y a la capital, donde desarrolló buena parte de su carrera profesional.
Lo hace, además, al cumplirse el primer aniversario de su fallecimiento y coincidiendo con la celebración del Orgullo, unas fiestas en las que Carrà fue reconocida como Icono Gay Mundial y reina del Orgullo en el World Pride celebrado en la capital en 2017.
Tras el descubrimiento de la placa, la calle se ha llenado con el sonido de sus canciones más célebres, interpretadas por el cuarteto Sonora.