La Sección 15ª de la Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a Kevin C. B. a ocho años de prisión, nueve años de pérdida de vigencia de permiso para conducir y las correspondientes indemnizaciones en concepto de responsabilidad civil a los perjudicados al considerarle autor penalmente responsable de un delito de conducción con manifiesto desprecio por la vida de los demás, un delito de conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas y un delito de homicidio en el denominado ‘caso kamikaze’.
El jurado popular declaró culpable al kamikaze de la M-50 de homicidio doloso al ser "plenamente consciente" de su conducta cuando conducía en sentido contrario y bajo los efectos del alcohol por esa vía de circunvalación de Madrid, donde acabó colisionando con el coche de Víctor López, de 20 años, al que causó la muerte.
En el veredicto, el jurado considera probado, por mayoría de ocho votos sobre nueve, que Kevin C. es culpable de homicidio doloso, es decir da por hecho que era consciente de que podía matar a otra persona con su conducta o tenía voluntad de hacerlo.
También por mayoría de ocho votos a uno le consideran culpable de conducir temerariamente. Creen, por unanimidad, que incurrió en un delito de conducción bajo los efectos del alcohol. La abogada de la familia del fallecido ha solicitado tras esta lectura del veredicto 14 años de cárcel para el acusado, mientras la Fiscalía ha pedido 9 años y medio al considerar las atenuantes de alcoholemia y reparación de daños.
Una semana después de declarar que no recordaba nada de las horas previas al siniestro, Kevin C. hizo uso el pasado lunes de su derecho a la última palabra para pedir perdón por haber cometido un "error" del que aseguró estar "completamente arrepentido".