El primer secretario del PSC, Salvador Illa, ha aplaudido este sábado el "paso importante" que ha dado ERC al aceptar las obras de la B-40 en el Vallès, y aunque ha insistido en que todavía quedan "flecos que no son menores" para acordar los presupuestos, ha confiado en que "en los próximos días" los podrán resolver. Mientras tanto, ERC ha vuelto a reclamar un referéndum de independencia al estilo de Montenegro.
En declaraciones a los periodistas durante una visita al barrio de la Marina del Port de Barcelona junto con el alcaldable del PSC en Barcelona, Jaume Collboni, Illa ha "agradecido y reconocido" el gesto de ERC, y ha enfatizado que los socialistas tienen "voluntad de acuerdo".
"Quedan cosas por resolver, pero espero que seremos capaces de hacerlo en los próximos días", ha remarcado Illa.
Sobre la aceptación por parte de los republicanos de ejecutar la B-40, el líder de los socialistas catalanes ha señalado: "Es un paso adelante importante que abre la posibilidad de que el lunes sigamos trabajando para proporcionar a Cataluña los presupuestos que necesitamos para poner el país en marcha".
"No tenemos ningunas ganas de alargar las cosas ni dilatarlas, pensamos en lo que lo conviene a Cataluña y a Barcelona", ha subrayado Illa.
ERC saca pecho y pide el referéndum
El presidente catalán, Pere Aragonès, ha esgrimido la "madurez" de Esquerra para tomar decisiones "complejas" en la negociación presupuestaria, respecto a la que la secretaria general adjunta de ERC, Marta Vilalta, ha criticado los "todo o nada, los chantajes y los todo vale maquiavélicos" de otros partidos.
ERC celebra hoy sábado su 29 congreso nacional en Lleida, una cita marcada por su nueva propuesta de referéndum pactado basado en la fórmula montenegrina, como también por la negociación de los presupuestos catalanes y las cesiones de los republicanos en últimas semanas para tratar de lograr un acuerdo con el PSC.
La cita de los republicanos llega dos días después de que en el Parlamento catalán, con el objetivo de desencallar las negociaciones, ERC cediera ante el PSC y aceptara ejecutar las obras de la B-40 en el Vallès, un proyecto que genera fuerte rechazo interno en Esquerra.
Pero en el inicio de su discurso ante los 1.400 militantes inscritos en la Fira de Lleida, Aragonès ha sido recibido con una gran ovación y cánticos de "presidente", disipando así las dudas de cómo sería recibido entre las bases tras esa complicada decisión.
Una sonora acogida que ha sido agradecida por el presidente catalán, que ha destacado la "madurez del partido, con decisiones complejas en las últimas semanas y días". "Decidir, liderar y gobernar no es fácil", ha admitido.
"Por eso, en momentos como el actual, que son determinantes, agradecemos la empatía, complicidad y comprensión de compañeros de viaje, y agradecemos que podamos contar con gobierno consolidado, sólido, con las cosas claras. Nosotros no estamos en las instituciones para pasar el tiempo. Hemos venido a transformar", ha dicho el presidente de la Generalitat y coordinador nacional de ERC.
En cualquier caso, ha insistido en la "importancia" de disponer de unos presupuestos "muy pronto". "Estamos decididos a tirarlo adelante y que sea una realidad lo antes posible", ha avisado, con vistas a las negociaciones de próximos días con PSC y JxCat.