El tanto de Morata en el 91' afianza la tercera plaza del equipo de Simeone ante un Girona que no perdía en su feudo desde el 28 de enero.
A la cuarta ha sido la vencida. Tras tres visitas a Montilivi sin ganar, el Atlético de Madrid ha conquistado por primera vez el feudo del Girona al que ha vencido por 0-1 gracias al tanto de Álvaro Morata en el tiempo de añadido del segundo tiempo.
El conjunto de Míchel, que no perdía en su campo en Liga desde el 28 de enero ante el Barcelona, tuvo sus ocasiones en un duelo disputado en el que el combinado de Diego Simeone ha sacado provecho con su segundo triunfo seguido para afianzar su tercera plaza aprovechando los empates de la Real Sociedad, Betis y Villarreal.
Por su parte, el club catalán encadena su segunda derrota consecutiva y ocupa la decimosegunda posición con 30 puntos, cuatro por encima del descenso que marca el Getafe.
El Atlético se queda cerca del gol
El Atlético de Madrid volvía a un feudo de mal recuerdo, puesto que en sus tres visitas anteriores al campo del Girona no ha pasado del empate. El conjunto de Simeone, lanzado tras su goleada al Sevilla, quería asentarse en la tercera plaza aprovechando los ‘pinchazos’ de la Real Sociedad, Betis y Villarreal, sus inmediatos perseguidores. Tenía más tiempo el cuero que su rival, el cual daba más sensación de peligro y tuvo su primer disparo a puerta por obra de Borja García que salió manso y centrado a las manos de Oblak.
Simeone apostó de nuevo por la dupla Memphis-Griezmann, que anotó la mitad de los goles en el 6-1 al combinado hispalense. Por su parte, el elenco de Míchel presentaba dos novedades en su zaga respecto al once que inició ante el Getafe en la jornada pasada: Miguel Gutiérrez y David López por Javi y Juanpe.
El conjunto gerundense llevó la iniciativa del choque a partir del minuto 10. Los locales, a través de posesiones largas, se adueñaban del balón, que circulaban a un ritmo medio y sin crear ocasiones manifiestas de gol. Sí que creó una clara su adversario con su dupla de moda: Depay recuperó en campo rival, se la cedió a Griezmann y el francés chutó a puerta encontrándose con Gazzaniga en el 21’.
La pareja atacante rojiblanca volvió a tener una nueva ocasión dos minutos después. Llorente filtró un pase al espacio a Griezmann en el flanco izquierdo y su centro al área chica lo culminó el exariete del Barcelona con una volea alta. Por ese sector seguía generando peligro el cuadro madrileño exigiendo en defensa a Arnau Martínez, uno de los laterales pretendidos precisamente por el Atlético de Madrid para la próxima temporada. Carrasco buscó sorprender al portero local con un golpeo al palo corto que fue rechazado por el arquero argentino.
La escuadra de Simeone se adueñó del envite apoyándose con el balón. Sus ataques posicionales eran contrarrestados por un Girona que defendía en su terreno de juego y amenazaba con salir al contragolpe. Por primera vez desde el costado derecho, el Atlético generó una nueva llegada peligrosa en la que Llorente centró y el rechace de David López lo recogió Depay que no estuvo fino en su finalización.
El combinado visitante continuaba siendo más protagonista en el campo local. Carrasco y Mario Hermoso sumaron dos nuevas oportunidades de gol. El club catalán perdió fuelle en el tramo final del primer periodo al no durarle apenas el cuero fruto de la alta presión rojiblanca que recuperaba y volvía a construir una nueva jugada.
Morata da tres puntos de oro al Atlético en el descuento
El primer aviso visitante no tardó en llegar. El Atlético de Madrid inició el segundo tiempo con una marcha más y su llegada por la banda izquierda comandada por Griezmann obligó a una buena mano de Gazzaniga a la potente volea escorada de Llorente. El Girona también reanudó el choque más intenso, respondió con un chut de Tsygankov dentro del área que buscó el palo corto de Oblak y el esloveno paró la ocasión con sus manos.
El conjunto de Simeone seguía con su presión avanzada y era más protagonista en el partido con la asignatura pendiente del gol. Por ello, el técnico argentino hizo un triple cambio: entraron Morata, Correa y De Paul por Depay, Lemar y Llorente. Míchel también movió el banquillo y sacó a Valery por Borja García.
Tras unos minutos de sometimiento rojiblanco, el club gerundense niveló el duelo. Conseguía también recuperar rápido el balón aunque le faltaba encontrar espacios en el área rival. A balón parado se acercó de nuevo a la portería madrileña en la que Aleix prolongó el centro lateral que estuvo cerca de rematar Santi Bueno.
Rodrigo Riquelme, cedido por el Atlético en el cuadro catalán y que es del agrado de Simeone, tuvo en sus botas otras oportunidad de gol con un tiro desde la frontal repelido por la zaga visitante. David García culminó el triplete de acercamientos locales al ver adelantado a Oblak y su golpeo lejano casi sorprendió al meta esloveno que reaccionó a tiempo despejando el chut con su mano derecha.
Míchel realizó una doble permuta: Oriol Romeu no pudo continuar por molestias físicas y dejó su lugar a Iván Martín; Stuani sustituyó a Castellanos en el partido 200 del delantero uruguayo con la zamarra gerundense. Simeone aprovechó para renovar su flanco izquierdo y Saúl reemplazó a Carrasco, de más a menos en el choque.
El Atlético volvió a acechar la portería contraria, nuevamente desde el lado izquierdo. Griezmann buscó el palo corto de Gazzaniga con un potente zurdazo que salió cerca. La ocasión de Rodrigo de Paul se fue más desviada. Simeone agotó los cambios: entró Witsel por Koke para afrontar los últimos 10 minutos del envite.
El encuentro fue disputado en su recta final. Riquelme se topó con Oblak al recoger un centro al segundo palo cuyo control no fue bueno y su disparo forzado lo amortiguó el guardameta del Atlético. Míchel tuvo que hacer frente a un segundo imprevisto: la lesión de Aleix García tras una carrera. El preparador español lo cambió por Bernardo, lo que trajo consigo el cambio de puesto de David López al mediocampo. Tsygankov también dejó su lugar a Toni Villa.
El Atlético de Madrid apretó en el tramo final. Correa se quedó muy cerca de finalizar una acción coral desde el flanco derecho que despejó Arnau fuera del campo. El posterior saque de esquina trajo el tanto visitante: el centro de Griezmann lo prolongó Correa en el primer palo y Morata empujó a placer en el segundo. Melero López había anulado la diana en primera instancia y, tras consultarlo con el VAR, dio validez al tanto del delantero español en el descuento. En los minutos finales, el club madrileño fue muy sólido en defensa imponiéndose a los centros laterales locales y salió de Girona por primera vez sumando tres puntos.
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