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Muchos estudiantes y pocos graduados

viernes 05 de febrero de 2010, 20:12h
La enseñanza universitaria crece año a año en todo el mundo, a un ritmo tan acelerado que la población estudiantil en este nivel se duplicara en la próxima década en todo el planeta. Pero no se trata solamente que aumente el número de estudiantes, lo importante es que aumente la cantidad de graduados, como forma más avanzada de capitalización en los recursos humanos de una sociedad. Veamos que está ocurriendo ahora en América del Sur, prestando atención a la situación de la universidad en Argentina, comparada con sus vecinos Chile y Brasil.

Brasil tiene cuatro veces más estudiantes que Argentina, pero sus graduados son doce veces más numerosos que los nuestros. Chile, con la quinta parte de estudiantes tiene una graduación igual a la mitad de la nuestra. Estas diferencias denotan una deficiencia en el costoso proceso de la enseñanza universitaria. La clave en estas comparaciones es nuestra escasa graduación, ya que tenemos muchos estudiantes y pocos graduados. No nos comparemos con Japón o los países desarrollados que gradúan normalmente entre el 70 y el 90 por ciento de sus estudiantes, sino con Chile y Brasil que, lo mismo que México, triplican la eficiencia en la graduación de nuestras universidades estatales. Nuestros vecinos gradúan más de sesenta de cada cien alumnos ingresantes y nosotros apenas veintidós. Nuestro nivel de graduación es uno de los más bajos del mundo. Mientras más estudiantes se requieren para tener un graduado mayor es el costo que el estado deberá afrontar para formar profesionales. Costa Rica, México, Panamá, y Brasil con algo más de 6 estudiantes tienen un graduado, Chile requiere 8 estudiantes y nosotros nada menos que 20 (uno de los valores más altos del mundo).

Para explicar estas grandes diferencias con nuestros vecinos hay que prestar atención al régimen de ingreso a la Universidad, En 1967 el gobierno constitucional implanto en Chile la denominada “Prueba de Aptitud Académica” (PAA) que significo un cambio en el ingreso a la educación superior. La PAA instauro pruebas para seleccionar a los postulantes sobre la base de la medición de los conocimientos requeridos por las carreras universitarias. La Universidad de Chile (estatal) fue la promotora de esta iniciativa, y desde el inicio puso a disposición del resto de las universidades, inclusive las privadas, este sistema de ingreso. La PAA a partir del 2004 fue sustituida por la “Prueba de Selección Universitaria” (PSU). En los últimos años ha mejorado la eficiencia en la graduación, o sea la proporción de graduados durante el ciclo normal de la carrera; esta magnitud era de apenas 39,1 en 1998, llega a 50,7 en el 2002, y se ubica en 61,2 por ciento en el 2008. Pero las PSU no solamente son un mecanismo para elevar el nivel de la enseñanza universitaria, sino que además suministran valiosa información, particularmente a los padres de familia, acerca de los resultados correspondientes a cada escuela secundaria. Los resultados individuales de la PSU son confidenciales, pero los resultados agrupados por alumnos provenientes de cada unidad escolar secundaria no. Ya es público en Chile, el puntaje obtenido en la última prueba (diciembre 2009) por cada grupo de postulantes provenientes del mismo colegio secundario. Esto significa que las PSU no constituyen únicamente un mecanismo de ingreso a la universidad, sino que sirven como un proceso de evaluación de calidad educativa de cada escuela secundaria. En Argentina este tipo de información pública está prohibida por la reciente Ley Federal de Educación.

Brasil aplica desde hace mucho exámenes de ingreso a fin de que las universidades seleccionen a sus alumnos. Tradicionalmente cada universidad aplicaba su propio examen “vestibular”; este era el método preferido por las universidades públicas. En el año 1998 el gobierno federal estableció el ENEM (Exame Nacional do Ensino Medio) como examen nacional para el ingreso a la universidad y para evaluar las escuelas secundarias; las notas obtenidas en el ENEM por los graduados secundarios son utilizadas como base para procurar elevar el nivel de las escuelas rezagadas. La PSU chilena tiene características comunes con el ENEM brasileño, ambas metodologías de examen previos al ingreso a la Universidad han sido mantenidas por décadas por gobiernos de centro-izquierda, que no confunden equidad social con disminución del nivel educacional. Ellos expanden su matrícula universitaria fortaleciendo la educación secundaria no rebajando exigencias académicas. Un ejemplo que los argentinos debiéramos imitar.

Alieto Guadagni

Economista

ALIETO GUADAGNI es economista graduado en la Universidad Nacional de Buenos Aires, con estudios de postgrado en la Universidad de Chile y Doctorado en la Universidad de California (Berkeley)

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