En Madrid
La recién constituida Asociación de Músicos de Madrid (AMA) ha pedido este viernes, frente al madrileño Café Central, que no se apruebe la ordenanza municipal de protección contra la contaminación acústica. Dicha ordenanza, elaborada por el Ayuntamiento de Madrid, prevé una multa de 750 euros para aquellos músicos que toquen en la calle y autoriza a la policía a confiscar sus instrumentos. De aprobarse el próximo 25 de febrero, Madrid se convertiría en la primera capital europea que prohíbe actuaciones callejeras, lo que los músicos consideran que supondrá "un empobrecimiento cultural" para la capital.