El presidente francés, Emmanuel Macron, ha mostrado este miércoles un mensaje de firmeza frente a la multiplicación de manifestaciones callejeras contra la reforma de las pensiones en una entrevista concedida simultaneamente a dos televisiones francesas y emitida a mediodía. "Cuando se recurre a la violencia en la calle, deja de ser la República", ha afirmado.
El presidente filtró este martes un mensaje de que ni cambiará el Gobierno, ni convocará elecciones, ni un referéndum, como le pide la oposición, poniendo fin así a la multitud de rumores sobre ese asunto. Sobre su primera ministra, Elisabeth Born, Macron ha afirmado que mantiene su confianza en ella".
Macron ha defendido su reforma de pensiones, que confía en que pueda entrar en vigor a finales de año pues es una "necesidad" para el país de la que él no obtiene "ningún placer".
Desde el bando presidencial se obstinan en dar por superado un pulso que sindicatos y oposición quieren mantener, tanto en el plano institucional como en el frente social, espoleados por lo apretado de la votación parlamentaria, que el Ejecutivo libró por tan solo nueve votos. La oposición ha presentado recursos ante el Consejo Constitucional y pretende forzar al Gobierno a convocar un referéndum, para lo que necesita 4,5 millones de firmas.
Pero la presión es más patente ahora en las calles del país, donde, desde que el pasado jueves el Ejecutivo decidió adoptar la reforma sin voto parlamentario, se han multiplicado las manifestaciones espontáneas, con frecuencia acompañadas de incendios de basuras o de mobiliario urbano. Según el Ministerio del Interior, se han registrado 1.200 de estas concentraciones, la mayor parte de ellas en la capital, donde solo en la pasada noche se produjeron casi 300 arrestos.
El titular de Interior, Gerald Darmanin, advirtió de que estas protestas antigubernamentales están entrando en una fase de "enorme desorden" y citó la invasión de edificios públicos, el lanzamiento de proyectiles contra las fuerzas de seguridad y la quema de vehículos. "Deberíamos todos homenajear a los policías y gendarmes heridos, condenar la violencia y, quienes lo deseen, manifestarse contra la reforma de las pensiones, de manera republicana", agregó.
Por la noche se vivieron de nuevo protestas y enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas del orden, que acabaron con algunos disturbios y quema de mobiliario urbano.
Los próximos días parecen clave para conocer la fortaleza del nuevo frente social, que los partidos de la izquierda y los sindicatos apelan a reforzar. El jueves aparece como una fecha clave, con la novena convocatoria de manifestaciones por todo el país, la primera desde que el texto acabara sus trámites parlamentarios. Los sindicatos cuentan con hacer una demostración de su fuerza.