La Academia Iberoamericana de Gastronomía (AIBG), en colaboración con la Dirección General de Turismo de la Comunidad de Madrid, ha planteado un proyecto que pone de relieve la importancia que tienen los pueblos y las ciudades con menos habitantes, en comparación con las grandes capitales y urbes.
Así nació “Madrid, de Pueblo a Pueblo”, una iniciativa para promover los atractivos y riquezas de los pueblos y municipios de la Comunidad de Madrid, de manera que los ciudadanos y los visitantes cercanos puedan conocer las bondades de cada territorio. La intención era crear un esquema que se pueda trasladar a otros pueblos y ciudades de Iberoamérica.
En relación con ese proyecto, la Academia decidió otorgar, hace unos meses, un reconocimiento a aquellas poblaciones, de en torno a los 50 y 150 mil habitantes, que destaquen por la cantidad y la calidad de sus servicios e instalaciones, promoviendo, de esta manera, la excelencia y el desarrollo sostenible de los diferentes municipios. Un reconocimiento al “Pueblo Modelo del Siglo XXI”.
Pueblo Modelo del Siglo XXI: requisitos
Para ello, la primera tarea de la Academia fue definir los criterios para poder conceder ese reconocimiento, estableciendo una serie de requisitos o condiciones que debe tener una localidad para ser considerada como “pueblo modelo”. Lo que implica, naturalmente, el bienestar y la calidad de vida de sus habitantes, pero también el interés para los visitantes y turistas. Por eso, entre los requisitos se incluyen algunos relacionados con la conectividad y el transporte o las posibilidades de alojamiento.
Y, por supuesto, los relacionados con la gastronomía y la alimentación. Hay muchos motivos para realizar visitas cortas pero, al final, todo el mundo desayuna, come y cena, por lo que es fundamental tener una adecuada oferta gastronómica.
Además, hay otros requisitos, como contar con los suficientes y adecuados servicios de salud, centros educativos y espacios culturales, seguridad en las calles, zonas verdes y políticas medioambientales o medidas para la digitalización.

Rafael Anson y el alcalde José de la Uz, con algunos miembros del ayuntamiento, representante sectoriales y vecinos de Las Rozas de Madrid.
Las Rozas, el primer Pueblo Modelo
El primer municipio que solicitó esa nominación en el marco de la Comunidad de Madrid fue Las Rozas de Madrid. El equipo del alcalde de Las Rozas, José de la Uz, presentó toda la documentación justificativa para optar a la candidatura.
Una extensa memoria que resume la historia de Las Rozas, con un pasado estrechamente vinculado con la actividad agrícola, y avanza hasta la actual digitalización de la Administración Pública, con medidas diseñadas para lograr el modelo de “Ciudadano 360º”.
Entre los aspectos más destacables, se encuentran las instalaciones y actividades deportivas, la inversión tecnológica o los espacios verdes y medidas sostenibles.
Y, por supuesto, al tratarse de una herramienta para la promoción turística, Las Rozas ha destacado su oferta en cuanto a alojamientos (de 4 y 3 estrellas); ocio nocturno (bares, salas de conciertos, pubs y discotecas); restaurantes (desde los más tradicionales a los locales de cocina internacional); y otros atractivos del municipio, como son sus centros de escalada o un circuito de karting.
En este planteamiento inicial, ha sido fundamental la colaboración de la Comunidad de Madrid y, muy especialmente, de la Consejería y de la Dirección General de Turismo.

El presidente de la AIBG, Rafael Anson, con el alcalde José de la Uz, entregando el diploma de reconocimiento como “Pueblo Modelo del Siglo XXI” a Las Rozas de Madrid.
Una iniciativa que es posible replicar
Como decía, se trata de una iniciativa pensada para que se pueda replicar en otras localidades, no solo de España, sino de toda Iberoamérica. Aquellos pueblos que consideren que reúnen las condiciones necesarias pueden presentar la documentación para optar a este título.
Pero, sobre todo, esperamos que muchos pueblos tomen como ejemplo a aquellos que ya son un modelo de excelencia, y que pongan en marcha las medidas necesarias para reunir las condiciones que merezcan ese reconocimiento. Lo que les permitirá seguir trabajando para alcanzar la excelencia, mejorar la vida de sus habitantes y poder estar a la altura de las exigencias del siglo XXI.