DISEÑADORA
La diseñadora asegura haber pasado cuatro años muy duros a vueltas con la crisis. Tuvo que abandonar una de sus tiendas en Madrid, pero ahora parece que ve la luz y afirma que los tiempos están mejorando. Además, Elena Benarroch está muy contenta con el hecho de que su hija Yaël quiera seguir sus pasos en el mundo de la moda. Todo ello coincide con otra buena noticia, la sensible mejoría de Miguel Boyer que le alegra enormemente pues Elena es una de las fieles amigas de Isabel Preysler.