el organismo constató que el ataque tuvo como objetivo a los desertores del Ejército y a activistas de la oposición
El portavoz del Ministerio sirio de Asuntos Exteriores, Yihad Makdissi, ha afirmado este domingo que lo sucedido el pasado jueves en la localidad de Tremseh --en la que, según fuentes opositoras, murieron más de 200 personas a manos de las fuerzas del régimen de Bashar al Assad--, "no fue una masacre, fue una respuesta militar", y ha asegurado que en los combates entre "las fuerzas de seguridad y los terroristas" solo murieron "dos civiles" y 37 combatientes.