En la FRONTERA
Estas palabras pronunciadas por el Papa durante la homilía de la Santa Misa que se ha celebrado esta mañana en la Basílica de San Pedro, han puesto el punto final a los trabajos del Sínodo de Obispos. Una reunión en la que 262 prelados de todo el mundo han abordado los temas más candentes, no solo de la Iglesia, sino de la vida internacional. Por eso, Benedicto XVI ha dicho hoy que “el amor única palabra capaz de romper el círculo vicioso de la venganza, del odio, de la violencia. De un corazón purificado, en paz con Dios y con el prójimo, pueden nacer propósitos e iniciativas de paz a nivel local, nacional e internacional. A esta obra, a cuya realización está llamada toda la comunidad internacional, los cristianos, ciudadanos de pleno derecho, pueden y deben dar su contribución con el espíritu de las bienaventuranzas, convirtiéndose así en constructores de paz y en apóstoles de reconciliación para el beneficio de toda la sociedad”.