primer cierre en 17 años
La falta de acuerdo presupuestario entre republicanos y demócratas ha empujado a Estados Unidos al primer cierre parcial del Gobierno en más de 17 años, un fenómeno que continuará hasta que el Congreso apruebe nuevos fondos.
El cierre obligará a mandar a casa a más de 800.000 de los 2,1 millones de funcionarios federales durante el tiempo que dure la escasez de fondos y podría costar más de 1.000 millones de dólares a las arcas públicas, según la Casa Blanca.
La emisión de datos económicos se interrumpirá y los parques nacionales cerrarán sus puertas, pero se mantendrán servicios básicos como el correo, el control de tráfico aéreo, los cheques de pensiones o la actividad de los agentes policiales y de seguridad.
Estos son los principales efectos de la suspensión de actividades en las principales órganos y agencias federales: